El IES Ricardo Marín recibe el premio por el cortometraje titulado “No lo alimentes”
El IES Ricardo Marín de Cheste ha sido galardonado con el Premio al Centro Educativo dentro del proyecto MOMO, tras presentar a concurso un cortometraje titulado “No lo alimentes”, financiado por la concejalía de Educación. En la pieza audiovisual, el patio del instituto se convierte día tras día en un basurero, ya que los/as alumnos/as tiran todo tipo de residuos durante el recreo. Esa basura cobra vida y poco a poco se genera un monstruo que acaba por comerse a uno de los estudiantes.
MOMO es un proyecto de innovación impulsado por la sociedad El Caleidoscopio, junto a 73 Ayuntamientos y con la colaboración de las Universidades de Valencia, Alicante y Autónoma de Madrid, de Cefire y CTIM, que une impresión 3D y electrónica digital con cine y cultura, y que tiene como resultado la creación de un un cortometraje de animación en Stop Motion con un fin social o medioambiental.
En total, en esta edición, MOMO ha recibido un total de 86 creaciones, 21 cortometrajes en categoría de Centro, donde ha sido premiado el instituto de Cheste, y 65 en la categoría de Estudiante.
“Por segundo año consecutivo el instituto de Cheste ha participado en este proyecto y quiero agradecer el trabajo realizado tanto por el profesorado como por el alumnado del centro, además de felicitarles por el buen resultado obtenido”, ha declarado la concejala de Educación, Mª Ángeles Llorente. “Cabe destacar que este tipo de proyectos de carácter transversal y globalizador completan la formación de los y las estudiantes, y por ello, desde la concejalía de Educación, continuaremos impulsando estas iniciativas”.
Esta semana ha comenzado la exhibición online de proyectos en la web http://elcaleidoscopio.com/wp/exhibicion-proyectos-momo/, donde también pueden visionarse las obras participantes en los proyectos La Feria Aérea y Programa tu obra, donde los y las estudiantes debían construir y crear un dron que solucione alguna problemática social o medioambiental del entorno más inmediato a los centros educativos, en el caso de La Feria Aérea, y programar un robot humanoide para convertirlo en actor dentro de un cortometraje creado por el alumnado, en el caso del proyecto Programa tu obra.