Todo empieza con la recepción de un mensaje de texto con la finalidad de robar el dinero de las cuentas
La delegación de OCU en la Comunidad Valenciana ha detectado un creciente número de casos de phishing con el fin de solicitar por internet los datos personales y bancarios del usuario y poder sustraer así dinero de su cuenta.
Todo empieza con la recepción de un mensaje de texto, aparentemente de su banco, avisando que «un dispositivo no autorizado se ha conectado a su cuenta en línea o que se ha realizado un cargo en su tarjeta», informa la Organización de Consumidores y Usuarios.
A continuación, ofrecen un enlace al afectado que nos lleva en una web similar a la de su entidad bancaria, donde tendrá que escribir su usuario y contraseña. De este modo consiguen los datos del cliente y llevan a cabo la estafa.
Recientemente, este caso le sucedió a un cliente de Bankinter, socio de OCU, que después de recibir el que parecía un mensaje de advertencia de su entidad, hizo clic en el enlace que lo llevó a un web aparentemente oficial del banco.
Allí se incluía un número de teléfono que marcó para confirmar el problema y no consiguió hablar con su gestor personal, pero poco tiempo después le telefonearon del presunto departamento de fraude informático para confirmar que no era él quien estaba haciendo cargos en su tarjeta.
Con el fin de bloquear la tarjeta le enviaron otro correo para que introdujera sus datos personales, momento en el cual se consumó una estafa por valor de 3.000 euros.
La OCU recomienda que además de la denuncia policial, se interponga reclamación ante el servicio de atención al cliente de su entidad o el defensor del cliente si la entidad bancaria tira balones fuera. Hay que aportar con detalle los hechos que acreditan que se trata de una operación no autorizada. «Si insisten en la negativa, el usuario puede acudir y tiene que hacerlo por la vía judicial», añade.