Comemos un 10% más de carne y un 6% más de huevos, pero ha bajado el consumo de aceite y fruta fresca
Nuestros hábitos de consumo han cambiado y el aumento del precio de los alimentos está detrás de esta variación. Así lo recoge un estudio que ha publicado este miércoles el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que dice que hemos cambiado las preferencias y ahora comemos un 10% más de carne y un 6% más de huevos que el año pasado, pero menos fruta o pan.
Sobre todo, ha bajado el consumo del aceite de oliva un 35%, mientras que la fruta fresca se ha reducido más de un 2%. En el último año, llenamos un 1,5% menos la cesta de la compra que llevamos a casa, según el mismo informe. La frase que más se siente a la puerta del supermercado es que «está todo por las nubes» y que «ha subido todo una barbaridad».
También hay quien no renuncia a elegir la comida sin mirar precios. «A veces es mejor comprar tres manzanas buenas en un lugar, que elegir cinco peores en otro establecimiento», comenta una clienta. El secreto está en emplear tiempo en la hora de comprar, congelar la comida o buscar alternativas más baratas. El que está claro es que el encarecimiento de precios hace que la gente cambio la dieta.
