El Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible avanza en Cheste
Cheste continúa avanzando en la elaboración del Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenibles (PACES). Ayer, miércoles 8 de mayo, se abrió a la población un taller de diagnóstico y participación pública con respecto a dicho plan que tendrá su segunda fase en el mes de junio, con la presentación del borrador.
El PACES integra la iniciativa europea de mitigación del Cambio Climático y la de adaptación al mismo. Es decir, que surge de la propuesta de 2008 del Pacto de los Alcaldes por la Energía Sostenible (PAES), donde se planteaba como objetivos de mitigación para 2020 la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) en un 20%, el aumento del 20% de la eficiencia energética y el aumento de las energías renovables, también en un 20%; y de los objetivos fijados desde “Mayors Adapt”, en 2014, para contribuir a una Unión Europea más resiliente, donde se enmarcaba el Pacto de Alcaldes y el apoyo local para mitigar el cambio climático. Así, el PACES contempla reducir las emisiones de CO2 y otros GEI en un 40% para 2030 y aumentar un 27% tanto la eficiencia energética como el uso de energía procedente de fuentes renovables. Finalmente, la adhesión al pacto, implica compartir una visión europea de futuro para 2050, con un nivel cero de emisiones y la limitación del aumento de la temperatura a 1,5 grados.
Este Pacto, que suma 77.555 municipios firmantes de 53 países, está coordinado a nivel provincial por la Diputación de Valencia, desde donde se facilita la intervención de consultoras que trabajan junto a los Ayuntamientos para desarrollar sus planes de acción. Cheste formalizó su adhesión en julio de 2016 y se encuentra en la fase de elaboración de un inventario de emisiones de referencia con el que se realizará una evaluación de riesgos y vulnerabilidades derivados del cambio climático para redactar posteriormente el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible. “Siguiendo los pasos del PACES, hemos recopilado toda la información necesaria para hacer la evaluación y nuestro objetivo es mejorar paulatinamente la sostenibilidad y medio ambiente del pueblo, adoptando medidas en cuanto a edificios municipales y alumbrado público, pero también en la localidad en general”, afirma el alcalde, José Morell.
En esta fase previa a que se establezcan las medidas de mitigación y adaptación del plan, la participación ciudadana es esencial, ya que los vecinos y vecinas pueden ayudar a definir la visión a largo plazo que permitirá al municipio reducir los impactos del cambio climático y adaptarse a un futuro de energía sostenible. Por ello, desde Ecoterrae, la consultora que trabaja junto al Ayuntamiento de Cheste en la elaboración del PACES, se ha facilitado una dirección de correo electrónico a la que enviar aportaciones: nurisanle@gmail.com.
“Como medidas de mitigación o reducción, el vecindario puede proponer acciones que contribuyan a reducir las emisiones que produce el transporte privado, por ejemplo a través de la mejora del carril bici de la localidad, de la peatonalización del centro del municipio o de la instalación de puntos de recarga eléctrica. En cuanto a medidas de adaptación, algunos ejemplos podrían ser el aumento de la cubierta vegetal en distintas zonas del municipio que, a su vez, permitan algún tipo de aprovechamiento, como puede ser la biomasa para caldera; o la organización de campañas de sensibilización ciudadana”, explica la consultora, Nuria Sánchez.